sábado, 16 de abril de 2011

Bueno, vale. Pues no era la última...

Hola Piruletas...
Gracias a tod@s por el apoyo. De verdad de verdad os digo (parezco un cura, eh?) que estaba en tinieblas y me habéis hecho ver la luz. Me sentía de bajón, como cuando con toda la ilusión del mundo le compré un cd de SS, la jefa de mi bro I, dedicado con todo cariño a A, el futuro suegro de D, que es un fan de ella. Y se lo dí todo cheo a D, pensando en que iba a flipar en colores y que me lo agradecería eternamente, y que a todos sus futuros hijos les llamaría Anxo por haberle hecho ganar un montón de puntos con su suegro. Pero D pone una cara rara. Y yo me pregunto ¿le habré dado uno de AC/DC en vez del de SS? Pero no. Es el último de SS. Entonces, infeliz de mí, le pregunto que qué pasa. Y el me dice que bueno, que está bien el detalle, que seguro que me lo agradecería un montón, pero... Pero qué? Le pregunto. Es que... me dice. Es que el nombre del padre de mi novia no es A. Es F.
Tócate las bolas, Baldomero. Dos o tres semanas recordándole a mi bro lo del CD, al final me lo trae, y voy yo y me equivoco de nombre. A era el nombre del suegro del futuro suegro, que era como se llamaba el bar que ya no es bar, sino el lugar donde jugábamos al pingpong. Qué bajón, hermanos. Pa mear y no echar gota. Así que si alguien conoce a un tal Arturo al que le guste SS, le puede regalar un disco dedicado.
Pero bueno, al final conseguí otro con el nombre correcto, y ya se me pasó el bajón, y ya vuelvo a escribir, y tal.

El caso es que se nos casó E. Ahora es EM. El fin del más grande mito sexual que ha habido en Pontevedra. Farraman se ha convertido en Minifarritaman. Seguro que alguna derramará alguna lágrima en su honor. Pero no hay vuelta atrás. Ahora es un hombre felizmente casado, y dentro de poco, supongo (podríamos hacer apuestas, pero yo diría que en 2012), padre ejemplar. Seguro. Porque aunque su imagen de Farraman es la que más destaca la gente que no lo conoce mucho, los que tenemos el honor de ser sus amigos sabemos que detrás de esa imagen hay una gran persona, un gran amigo que sabes que nunca te va a dejar en la estacada ni te va a fallar, y que siempre está ahí apoyando, ayudando y preocupándose por los demás. Y por eso puedo decirte, E, que te quiero mogollón, cabronazo. Y que te mereces estar con una buena mujer como es M, que es un cacho de pan. Felicidades a los dos. A ver si traéis a Pinocho con vosotros...
Si en las anteriores bodas he destacado distintas facetas, en esta destacaré la emoción que envolvía a parte de los participantes. Hablaron sendos hermanos de los contrayentes y la mejor amiga de la novia. Y quitando a la hermana de la novia, que no lloró, lo que es la amiga, N, no podía casi hablar con la emoción y con los lagrimones que le caían. A moco partido. El alcalde, ante la emotividad del momento y en total sintonía con la pobre N, se estaba partiendo de risa. Pobre (ella, claro, que el alcalde lo pasó pipa). Pero ya sabemos que las tías pa eso son así. Lloran en una boda, que es algo que normalmente da alegría a los demás. ¿Por qué? No lo sé. Yo no las entiendo. Pero lo de Q... lo de Q fue una sorpresa. El hombre de hielo, el hombre que no lloró ni siquiera cuando el médico le dio las palmadas en el culo... Mr. Anónimo... Va y nada más empezar a hablar se deshace en un mar de lágrimas. Su hermano se casa con una mujer estupenda en todos los sentidos y va él y se pone a llorar como una nenaza. Y lo que es peor, le contagia la llorera al padre, a la madre, a la sobrina de EM, e incluso al propio novio, que tuvo que solucionar la papeleta con un abrazo fraternal que dejó huella hasta en los corazones más curtidos, en un arranque de amor fraternal que tornó las lágrimas de la madre en una sonrisa feliz, orgullosa de ver el amor que sus hijos se prodigaban. En fin. Un abrazo, Q. Si no hubiera perdido mis lacrimales en Vietnam, yo también habría llorado.

Otro detalle a destacar, y que demuestra lo extraño del pensamiento de las mujeres, fue el de la conductora del bus. Veréis. Había dos buses. Uno iba delante conducido por un señor. El otro, en el que iba, entre otros, yo, iba detrás, conducido por una señora o señorita, perfectamente capaz y que nos llevó con total profesionalidad hasta el pazo. Pero nos mandaron a dar la vuelta antes de dejarnos, y ahí surge el detalle. El primer bus entra de frente en un cruce, sale marcha atrás y listo. Vuelta dada. Nuestra conductora ve la maniobra. El otro bus se va y le toca el turno a ella. Y... ¿cómo da la vuelta? Pues totalmente al revés. No le debió parecer correcta la maniobra de su compañero, y en un alarde de inspiración pasó el cruce, entró en él marcha atrás, y, después de al menos 10 maniobras y con todo el pasaje totalmente asombrado/espantado por la complicación buscada para una maniobra tan simple, logramos dar la vuelta. ¿Por qué? Quien sabe. Conducía perfectamente, pero se complicó la vida para dar la vuelta por no hacerlo como su compañero. ¿Acaso le caía mal? ¿Tenía que demostrar que las mujeres son superiores y por eso los del otro bus nos llevaban dos canapés de ventaja? Explícamelo, X, tú que sabes de esas cosas.
Y así llegamos al pazo. Y había un violinista y un acordeonista, y camareros, y pinchos, y bebida, y comida (tremendas cigalas... tamaño XXL y calidad extra), y carneiro ó espeto, y más bebida y baile y jiji, y jaja. Una boda como dios manda, y siguiendo el ejemplo de PA, con fotos de los novios desde pequeños. Todo entre la familia (por desgracia, no toda) y con los amigos (por desgracia, tampoco todos. Animo, Sucio, estamos contigo).

En fin. Que una gran boda. De esas que al día siguiente dices (yo por lo menos, lo dije) No vuelvo a beber. Porque a noches alegres, mañanas tristes. Otro día más y mejor.

Abrazos a todos.

4 comentarios:

Josín dijo...

Lo sabía... Mi estrategia dio resultado (y si no la dio déjame creer que sí)

Unknown dijo...

Claro, y así todo el mundo te hace comentarios... yo creo que lo tuyo fue una estrategia para que todo el mundo escribiera, voy a tener que hacer yo lo mismo en mi blog xa que todo el mundo ponga algo!!!

Anyway que me alegro que estés de vuelta y sigas por aquí.

Bicos

Q dijo...

Que bonito todo y que elegante iba nuestro Bloguero.

Que conste que me hice el emocionado porque la ocasion lo merecia.

Un brazo y pasame las fotos.

Aida dijo...

Ya no recordaba las maniobras de la autobusera, qué fuerte, no entendíamos nada...en fin, que qué bien nos lo pasamos,qué guapos estábamos,cuánto comimos,cuánto bebimos (sobre todo algunos)y cuánto bailamos...